para templar el frio,
esperamos tu llegada
con la impaciencia de un niño.
Te delatan los
almendros
engalanando sus
ramas,
discreta acercas los
aromas
del tomillo y la lavanda.
Tintineantes y
voraces
las mariposas van
despertando
nos llenan de fiesta
para celebrar que
renaces.
Inigualable y
añorada primavera
que embriagas el
alma entera
haces que olvidemos
nuestras penas y miserias.
Yolanda Martínez Izquierdo
2016