Empuñando mí preciada pluma
cual si de una daga se tratara
me dispongo a herir de forma alguna
con palabras hirientes y cargadas.
Conste que guerra no me gusta ninguna,
ni soy persona que a faltar alcance,
pues no por ello sea yo figura
a quién puedan agredir y calle.
No es fácil que provoque a mi adversario,
ni sea ligero en lanzar el guante,
no soy como un corsario,
pero si he de recogerlo no me achanto.
Más mi honor jamás caerá en deshonra
aun pudiendo parecer a veces necio
elijo vivir libre y luchando
a conformarme y vivir,
a cualquier precio.
Yolanda Martínez Izquierdo
2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario